¿Por qué andamos a dos patas? somos bípedos ...

La respuesta la tiene Peter Wheeler, fisiólogo de la Universidad John Moores, en Liverpool, Gran Bretaña. Opina que los homínidos echaron a andar para protegerse del sofocante calor de la sabana. Éstos, a diferencia de otros mamíferos, carecían de mecanismo fisiológicos para evitar el calentamiento de la cabeza -los antílopes, por ejemplo, lo consiguen a través de un sofisticado sistema de refrigeración de su hocico-. Utilizando maniquíes de homínidos a escala, Wheeler ha comprobado que, en la marcha bípeda, el cuerpo recibe un 60 por 100 menos de radiación solar.