En 1993 se comercializó el primer reloj con teléfono móvil integrado, podía leerse en distintas publicaciones el siguiente anuncio:
Hablar por teléfono a través del reloj ya no es patrimonio de los espías, los detectives privados y los astronautas de las películas de ciencia-ficción.
Ahora también usted puede hacerlo con el Panasonic KX-T9900 que, además de marcar la hora, permite la comunicación telefónica sin interferencias y con un sonido limpio y claro.
Estará a la venta en octubre de 1983 y su precio en Europa no será superior a 150.000 pesetas.
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